El Departamento
Nacional de Planeación, a quien la nueva constitución le ha encomendado algunas
de las labores de evaluación, ha presentado en Santa Marta las experiencias de
cinco Proyectos de inversión.
Esta columna no apareció en las dos últimas semanas por motivo
de viaje de su autor. Estuve en Uruguay participando en un proyecto de vivienda
y posteriormente hice una presentación en Santa Marta en un interesante
seminario organizado por el Departamento Nacional de Planeación. El Seminario
de Santa Marta sirvió para refrescar en mi memoria algunas de mis experiencias
de trabajo.
El tema del seminario
era la evaluación posterior (ex-post) de los proyectos de inversión del sector
público. Desde hace mucho tiempo el tema ha despertado mi interés profesional.
Desde 1984 he tenido contactos, infructuosos, con algunos de los gobiernos
Distritales para participar en la evaluación del programa de lotes con
servicios del Proyecto financiado por el Banco Interamericano de Desarrollo en
Ciudad Bolívar.Infortunadamente, después de siete años no ha sido posible
iniciar el trabajo de evaluación.
Cuando estuve
trabajando como Gerente de la Empresa de Energía Eléctrica de Bogotá le dí
mucha importancia al tema de la evaluación ex-post. Como un paso importante
para comenzar un nuevo préstamo de distribución con el Banco Mundial, decidimos
hacer una evaluación del llamado sexto programa de ensanches en su primera
etapa. Este ejercicio fue muy útil pues permitió hacer ajustes en la nueva
etapa.
La experiencia ganada
en la evaluación de un programa ya terminado, la verdadera evaluación ex-post,
nos llevó a emprender una más ambiciosa sobre el proyecto Guavio. Esta
evaluación intermedia de un proyecto de tal magnitud permitió identificar los
principales problemas que aquejaban al proyecto en ese momento. El documento de
evaluación que en esa época se produjo, sirvió como elemento importante de
discusión con los interesados en el proyecto. Este documento nos permitió una
discusión más productiva con los organismos multilaterales de crédito y con las
autoridades de orden nacional cuando tratamos de encontrar una solución al
problema financiero del proyecto.
A los asistentes del
Seminario, que escucharon una muy buena presentación sobre el proyecto Guavio,
les puede sorprender que estas experiencias tan importantes realizadas por la
propia Empresa, por encima de las exigencias mismas de los contratos de
préstamo, no se hubiera mencionado. La respuesta se puede encontrar en algunas
de las conclusiones del consultor encargado de la evaluación del Proyecto
Guavio. Uno de los mayores problemas del proyecto ha sido el continuo cambio en
la Empresa de Energía que ha llevado a que la memoria institucional de la Empresa
desaparezca.
La importancia de
mantener un equipo estable en la empresa fue una de mis prioridades. En efecto,
a mi entrada a la Empresa confirmé a todos los Subgerentes, Jefes de División y
de Departamento. Durante mi gestión, llevé a cabo una política de promoción
interna. El único cambio a nivel de Subgerentes fue en el Proyecto Guavio pues
el funcionario tuvo que renunciar como consecuencia de una investigación de la
Procuraduría. Quien reemplazó dicho funcionario fue un Jefe de División con amplia
experiencia en el campo de la construcción de obras civiles.
El año en que estuve en
la Empresa de Energía de Bogotá ha sido sin lugar a dudas el período de mayor
estabilidad laboral en una empresa del Distrito. Esta estabilidad es más
notable si uno recuerda que durante este período el Distrito tuvo tres
Alcaldes. El gobierno que comenzó en 1986 introdujo la nefasta costumbre de
solicitar la renuncia de todos los subgerentes de las Empresas Distritales. La
rotación en las subgerencias de la EEB es de tal magnitud que únicamente el
Subgerente de Operaciones ha logrado sobrevivir a los cambios ocurridos a
partir de 1986.
El Departamento
Nacional de Planeación, a quien la nueva constitución le ha encomendado algunas
de las labores de evaluación, ha presentado en Santa Marta las experiencias de
cinco Proyectos. En opinión unánime de los asistentes a Santa Marta el
ejercicio iniciado por el DNP debe continuar. La formulación y la posterior
ejecución de los nuevos proyectos de gran inversión a nivel nacional puede
ganar muchísimo de la Evaluación de Proyectos.